La familia Jiménez ha crecido junto a la compañía, demostrando que, más allá de la luz, lo que realmente brilla es el compromiso de las personas que la componen
En Ximenez Group, la historia de la familia fundadora es bien conocida. Pero, entre el brillo de los proyectos que iluminan ciudades de todo el mundo, hay otra familia que ha dejado su huella en la compañía. Se apellidan Jiménez y, al igual que los Ximénez, llevan décadas dedicados a la luz. Tres generaciones de esta familia han trabajado en la compañía, convirtiéndose en testigos y protagonistas de su evolución. Desde fábrica y almacén hasta la instalación de los proyectos más innovadores, su historia es la de un camino construido con esfuerzo, pasión y compromiso que ha crecido junto a la compañía.
Este es un viaje al corazón de la otra familia Jiménez, con ‘J’, de Ximenez Group. Un relato de esfuerzo, evolución y arraigo que demuestra que, más allá de las luces, lo que realmente ilumina esta empresa son las personas que la hacen posible.
La primera generación de los Jiménez estuvo encabezada hace más de cuatro décadas por José Jiménez, quien inició una tradición familiar de montadores. Su llegada a la compañía coincidió con la labor pionera de Francisco Jiménez Carmona, fundador de Ximenez Group, cuya visión y trabajo dieron forma a la empresa que hoy es líder en iluminación artística y decorativa. Comenzaba así la historia de una tradición familiar que ha perdurado a lo largo de las generaciones y que corre en paralelo a la de la propia familia fundadora.
El miembro más veterano de los Jiménez comenzó trabajando en el almacén para poco después convertirse en chófer, aunque prácticamente durante toda su vida laboral en Ximenez Group, hasta la jubilación, estuvo trabajando como carpintero.
Los tres hijos varones de José Jiménez se incorporaron poco a poco a la compañía, aprendiendo el oficio desde dentro y continuando con el vínculo familiar, todos ellos en el departamento de Montaje. Su primogénito, también llamado José, se ha jubilado recientemente en la compañía. Fernando, el mediano de sus vástagos, también formó parte de la plantilla de Ximenez Group durante años hasta su fallecimiento por una grave enfermedad.
En la actualidad, Salvador, el pequeño de los Jiménez, es capataz en el equipo de montaje de Ximenez Group, donde lidera un grupo en el que varios miembros de su familia trabajan codo a codo junto a él. Su cuñado, su sobrino y su propio hijo siguen sus indicaciones para asegurar que cada instalación se realice con la precisión y el esmero que caracterizan a la empresa. Juntos, combinan experiencia y pasión para llevar la magia y la ilusión a cada rincón donde Ximenez Group tiene presencia. Sin embargo, a pesar de los lazos familiares que los unen, en el trabajo prevalece la profesionalidad por encima de todo: cada uno desempeña su función con dedicación y rigor, respetando los procedimientos y manteniendo el compromiso que demanda la compañía.
Doble responsabilidad
“Trabajar en un ambiente tan cercano es todo un placer, aunque no hay diferenciación, todos somos iguales”, apunta Salvador mientras ayuda a los miembros de su cuadrilla a tirar el cable que en unos días servirá para encender la feria sevillana de Osuna. Todos los que trabajan bajo su mando dan fe de ello. Para su hijo, que también se llama Salvador, la responsabilidad es doble: no solo debe hacer bien su trabajo, sino estar también a la altura de la trayectoria de los Jiménez en Ximenez Group. Su abuelo dedicó toda su vida laboral a la empresa hasta su jubilación y su padre acumula ya más de 35 años en la compañía. Por algo será…
La responsabilidad de mantener viva la tradición familiar también recae sobre su primo Fernando, hijo de otro miembro de la familia Jiménez que trabajó en la empresa hasta su fallecimiento. Juntos, tanto él como su primo Salvador, comparten el reto de mantener viva la tradición y los principios de sus antepasados, cada uno con su propio compromiso y pasión.
Pedro, el cuñado del capataz asegura que la confianza, el apoyo y el compromiso compartido hacen que el ambiente en el equipo sea más cercano, lo que facilita el trabajo y permite llevar la magia y la ilusión de todos los proyectos de la compañía a las ciudades con una gran eficacia.
La pasión de esta familia por la iluminación y el compromiso con el oficio han pasado de generación en generación, demostrando que el apellido Jiménez en Ximenez Group es sinónimo de dedicación, esfuerzo y orgullo por llevar la luz a cada rincón del planeta.